El hierro es importante para el sistema inmunológico, para el crecimiento, gestación y lactancia. Se aplica al inicio de estados congestivos y procesos inflamatorios y febriles (inflamación seca sin secreción). Para dolores producidos por hiperemias. La falta de hierro en las fibras musculares de la pared intestinal, provoca un retraso en los movimientos peristálticos del intestino, trayendo como resultado una dificultad en el vaciamiento de las heces. Otra aplicación es la relacionada con la perdida de tonicidad muscular. Entre los síntomas también hay malestar en el estómago luego de la ingesta de alimentos ricos en grasas.
Los dolores que corresponden al hierro empeoran por la noche; aumentan con calor y el movimiento. Mejora con reposo y disminuyen con el frío.
Síntomas
Hemorragias, heridas recientes, contusiones, torceduras. Bronquitis. Bronconeumonía. Congestión pulmonar. Fiebre. Incontinencia de orina. Otitis. Neumonía. Tendencia a las hemorragias con sangre de color rojo vivo. Sarampión. Diarreas estivales con fiebre, estados anémicos, enfermedades infantiles debilitantes, dolor y síntomas reumatoides, problemas traumáticos (heridas, hemorragias, contusiones y distensiones), sobrecarga física, gastritis catarral con vómitos y espasmos. Para el sangrado femenino.
Situación que empeora con la noche, con calor y movimiento y mejora con reposos y aire fresco.
Esencia a la potencia 12X, 15 ml – para casos crónicos
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